Blanqueamiento

El blanqueamiento dental es un tratamiento estético que logra mejorar el color de los dientes, dejándolos varios tonos más blancos al de su color natural. Puede realizarse tanto en la clínica dental como en casa, lo que varía es la concentración del producto. Para realizar el tratamiento blanqueador en casa se confeccionan unas férulas a medida donde se aplica el producto blanqueador que se facilitará en la clínica. Los productos blanqueadores que se venden, al margen de las clínicas dentales, llevan una concentración similar a la de las pastas de dientes blanqueadores (concentración máxima de 0,1% de peróxido de hidrógeno o 0,3% de peróxido de carbamida) por lo que su efecto es prácticamente nulo.

Es imprescindible una limpieza bucal antes del tratamiento para poder eliminar el sarro y las manchas externas de los dientes y así que el producto tenga la máxima eficacia. El éxito del blanqueamiento dependerá de cada paciente (hábitos, color de sus dientes, etc) y habrá casos en los que no esté recomendado llevar a cabo el tratamiento blanqueador por presentar el paciente grandes manchas blancas o tinciones severas como las producidas por tetraciclinas. En estos casos, puede optarse por la colocación de carillas de composite o cerámica.

También puede realizarse el blanqueamiento de un solo diente que se haya oscurecido al haber perdido su vitalidad y estar endodonciado normalmente como consecuencia de un traumatismo. Esto es el llamado blanqueamiento interno.